El 17 mayo, Billie Eilish impactó de lleno en sus montones de fans al lanzar -de forma sorpresiva- Hit me hard and soft, su tercer álbum de estudio. Luego de acompañar este estreno con Lunch, el primer single, la cantante liberó Chihiro.
En el video, dirigido por ella misma, la californiana recorre los sombríos pasadizos de un edificio hasta encontrarse con el actor y músico Nat Wolff, su coprotagonista en esta historia. Mientras ellos pelean y logran salir a la luz, cobra relevancia la dimensión psicológica planteada en la producción, acorde a las reflexivas palabras de la joven, que sentencian “Cuando vuelva, ¿sabré qué decir? Hoy no, tal vez mañana. Abre la puerta, ¿puedes abrir la puerta? Sé que dijiste antes que no puedes soportar más”.
“Imaginó una narrativa onírica en la que los pasillos largos y oscuros y las puertas que se cierran simbolizan los diferentes rincones de la mente. Ella cae en una conexión ineludible. La expresión externa de un tira y afloja interno, cuando nuestros sentimientos más profundos de miedo, amor o deseo inevitablemente nos alcanzan, sin importar cuánto intentemos huir”, expresa un comunicado de prensa sobre la inspiración de Eilish al momento de crear el single.
Billie no piensa parar en lo que queda del año, ya que tiene pautada una gira, a partir de julio, por Europa, Estados Unidos y Oceanía.