Tras cinco años sin poner manos a la obra, Tame Impala publicó Deadbeat -su quinto álbum de estudio- y revolucionó, una vez más, la escena del indie rock. Tras liberar End Of Summer, Loser y Dracula, el estreno llegó potenciado por My Old Days.
El video intercala imágenes de Kevin Parker tanto en un estudio de grabación como caminando por la ciudad y en medio de la naturaleza. El filtro retro con el que es captado refuerza las vibras clásicas de un tema cuyo sonido electrónico -sello inconfundible de los australianos- lo ancla en el nuevo milenio.
Este es el comienzo de una flamante etapa para los de Perth, ya que se trata del primer lanzamiento con Columbia Records, propiedad de Sony Music. Dicho acontecimiento tiene lugar después de que el frontman vendiera su catálogo musical -tanto pasado como futuro- a aquel sello en mayo del año pasado.
De todas maneras, ese tiempo sin novedades fue fructífero para la agrupación: colaboró con Thundercat en el sencillo independiente No More Lies, se unió a Diana Ross para cantar Turn Up The Sunshine -parte del soundtrack de la película Minions: The Rise of Gru-, se asoció a Gorillaz y Bootie Brown en New Gold, dejó su huella en la banda sonora de Barbie con Journey To The Real World y trabajó con Justice en su disco One Night/All Night y con Dua Lipa en su placa Radical Optimism.
En medio de esta euforia, Tame Impala anunció que será telonera de Justice durante la gira australiana del dúo francés en diciembre. Brindará una sesión especial de DJ en cada concierto y hará delirar a las masas. Y, a partir de abril, seguirá su camino por las principales ciudades europeas.
