Los ciclos de Martes Indiegentes ya son un clásico de la escena under porteña y un imperdible para los que no acostumbran a ir a recitales los martes a la noche.
Riel, Niños del Parque, y Asalto al Parque Zoológico , junto con Altocamet, Pale Dian, y The Stargazer Lillies (que hicieron su parada en la Ciudad en el marco de una gira que incluyó Santiago de Chile, Viña del Mar, Lima, y que culminó ayer en Mar del Plata) fueron las bandas responsables de dar, en esta edición, el show para los presentes en un clima familiar de tranquilidad. Para el indie, estar en Niceto es como estar en casa.
De acá
Camisas manga corta estampadas, bigotes prolijamente cortados, pelos largos despeinados, anteojos. Qué ejercicio maravilloso entrar a un recital con los oídos tapados y tratar de ver la esencia, el folklore que nutre a cada estilo músical.
Los primeros acordes fueron de RIEL. La opacidad, la vorágine del dúo se palpaba en el aire, la vibración no de la batería al palo sino de la energía que desprende este perro de dos cabezas que son Mora y Germán, sus integrantes. En el Lado B de Niceto también estuvieron los chicos de ASALTO AL PARQUE ZOOLÓGICO (APZOO), que desplegaron un show distinto en el que la voz de su cantante se distinguió más que nunca, muy por encima de la música. NIÑOS DEL PARQUE dio la nota con el estilo cuidado de su sonido. Todo perfectamente calculado y el punto justo de efectos, dieron a esta banda de space rock un sonido atmosférico apoyado también por su fuerte propuesta visual.
Fotos: Florencia Petronacci
Canu Valenzuela se acercó al micrófono, guitarra al cuello: “Esto es ALTOCAMET” murmuró, y los aplausos estallaron abajo del escenario. Si ya los viste en vivo, sabés que el trío marplatense nos tiene acostumbrados a una calidad fuera de lo común, y su actuación el martes por la noche no fue la excepción. Con un sonido impecable la banda hizo un repaso por sus mejores temas, que incluyeron “Aurora Boreal” y “Somos Tornado” entre otros.
Arriba el cielo, abajo el mar
PALE DIAN y THE STARGAZER LILIES fueron la nota internacional y el plato fuerte de la noche. Ángeles y demonios respectivamente, la dicotomía que empezó a gestarse cuando Ruth Ellen levantó la voz al micrófono. Ella, un instrumento más, era sólo una nota tímida dentro del complejo entramado sonoro que propone el grupo. Su voz, angelical, casi lírica, parecía emitir ecos desde el más allá.
Cuando “We just want to say FUCK TRUMP” dijo Kim Field, ya podía adivinarse que la cosa venía más pesada. The Stargazer Lilies subió al escenario y tiró sus primeros acordes. Con la batería de aires minimal de Tammy Hirata que marcaba el ritmo, una puesta en escena más poderosa que la de sus coterráneos, guitarras psych rock en contraste con la voz de sirena gótica de Kim, su cantante, hicieron que THE STARGAZER LILIES tuviera un sonido envolvente, casi cinematográfico que trajo aún más oscuridad a la noche.
[post_view]