Si hay un disco que marcó a fuego el camino del post punk ese es, sin dudas, Unknown pleasures. Prueba de la inmortalidad del primer álbum de Joy Division es el proyecto que verá la luz en octubre a través de Pace Verso. Se trata de un NFT que transformará el púlsar de la portada en piezas de audio, que serán enlazadas con la voz de Ian Curtis. Su nombre será nombre CP1919, en honor a la estrella de neutrones que ilustra una de las artes de tapa más icónicas de la historia del rock.
El material incluye dos portadas diferentes denominadas CP1919: Sweeping Sun White 2023 y CP1919: Sweeping Sun Black 2023, que las muestran en sus maquetas coloreadas en blanco y negro. White contiene audios inéditos de la banda y Black presentará un disco duro físico, una banda sonora de música ambient y fragmentos pronunciados por Curtis desconocidos hasta el momento.
Peter Saville, el artista visual que creó el booklet original, se alió en este trabajo con Stephen Morris -baterista de Joy Division y de New Order- y al Joy Division Archive. “A principios de los 2000, modelamos una versión física de la portada que, eventualmente, se convirtió en un paisaje virtual. Usamos una fuente de luz en movimiento. De repente, se sentía como un amanecer y atardecer. Volví a esos archivos durante la cuarentena. Me senté mirándolo, pensando: ‘esto necesita una banda sonora’. Así que llamé a Stephen”, contó. La música fue compuesta por Morris basada en la señal de radio del CP1919 combinada con sonidos procesados de la agrupación no escuchados anteriormente. “Lo más raro fue poner a Ian en esto. Encontré dos frases cortas de una versión en vivo de ‘Atrocity exhibition’. Tuve suerte de que había algo de Ian que nadie nunca había oído”, confesó.
Este próximo lanzamiento se potenció gracias a la reciente inauguración en Manchester de un mural del rostro de Ian Curtis -firmado por Akse- que fue vuelto a pintar luego de que Amazon lo eliminara en 2020 para publicitar en ese espacio al rapero Aitch. Ahora, la flamante obra se ubica al costado de un pub cercano a la estación de tren de Piccadilly y la fecha de su presentación coincidió con el Día Mundial de Prevención del Suicidio. Esto deja en claro que la influencia de Joy Division no conoce límites.
