TEENAGE FANCLUB, ¿la segunda mejor banda del mundo?

Artista: Teenage Fanclub
Disco: Grand Prix
Año: 1995

Vas a encontrar este disco revolviendo entre tus cosas. O entre las cosas que aún conservás de tu ex, posiblemente. Si está entre tus cosas, hagamos de cuenta que así como te lo regalaron lo dejaste y no recordás haberlo escuchado en ese momento. Si está entre las de tu ex, bueno, la frase “uno no sabe lo que tiene hasta que lo pierde” aplica a la perfección.
Grand Prix de Teenage Fanclub salió a la luz en el año 1995 y cataloga para el universo entero como un disco de grandes canciones. Para el universo, menos para Apple Music y para Spotify, claro, que no lo tienen entre sus vastos y ultra-completos catálogos de streaming.
Este trío de compositores, cantantes, brujos medievales escoceses o vaya a saber uno bien qué son, hicieron este álbum de 13 hermosas canciones pop-rock, repletas de guitarras jangle, en capas, armonías vocales impecables, ritmos repetitivos pero dinámicos y ese ligue infaltable de melodías frescas y pegadizas. Y si por ese entonces ellos iban camino a la cima del mundo, con Grand Prix se sentaron, prendieron un cigarro ahí arriba y nos dejaron acá abajo a todos nosotros deleitándonos y enamorándonos de sus riffs de guitarras resonantes. Entonces no esperes que vuelva Liam Gallagher a decir que Teenage Fanclub es la segunda mejor banda del mundo (después de Oasis). La experiencia de encontrarte con este disco, ya sea en la ruta, en tus vacaciones o en la separación de bienes después de que te dejaron, hace obligatoria la escucha entera, sin saltearte las baladas como «Tears, Say NoB» o «Going Places«, aunque te pongan la piel de gallina. Este disco alevoso te saca de ahí y te deja en el mejor estado. Lujo escocés en 45 minutos.

Tres enormes tracks de introducción a Grand Prix:
«Sparky’s Dream», para esa mañana de sol.
«Neil Jung», para corazones rotos en recuperación.
«Going Places», para empezar de nuevo.